Hoy, 25 de septiembre los afamados actores Michael Douglas y Catherine Zeta Jones cumplen 70 y 45 años, respectivamente, un aniversario coincidente para una pareja que se ha vuelto a reencontrar después de un tiempo de crisis marcado por los problemas de salud.
El estadounidense y la galesa, ambos ganadores del Oscar, se casaron en Nueva York en 2000 y son padres de dos niños, Dylan (14) y Carys (11), aunque su relación se debilitó entre 2010 y 2013, cuando Michael Douglas se enfrentó con un cáncer de garganta en estado avanzado y Catherine Zeta-Jones fue internada por un desorden bipolar.
El año pasado por estas fechas, la prensa del corazón confirmaba que los intérpretes hacían vidas separadas y se estaban «dando un respiro«, después de que el estrés hubiera pasado factura al matrimonio.
Ese distanciamiento hizo que no celebraran juntos su cumpleaños, como solía ser tradición en la familia, algo que Douglas incluso practicaba desde antes de conocer a su esposa cuando se reunía para festejar la onomástica con el actor Christopher Reeve y la presentadora Barbara Walters, también nacidos ese día.
De hecho, fue un 25 de septiembre, en 1999, cuando los tabloides ingleses fecharon una supuesta fiesta de compromiso nupcial de Douglas y Zeta-Jones, algo que desmintió el representante del actor, que dijo por aquel entonces que se había confundido su celebración conjunta de cumpleaños con las campanas de boda.
A finales de la década de 1990, Michael Douglas era ya una estrella consagrada en Hollywood, donde había protagonizado cintas como «The China Syndrome» (El síndrome de China, 1979), «Fatal Attraction» (Atracción fatal, 1987), «Wall Street» (1987) y producido «One Flew Over the Cuckoos Nest» (Alguien voló sobre el nido del cuco, 1975), mientras que Zeta-Jones estaba a punto de alcanzar el punto más alto de su carrera.
Tras aparecer con Antonio Banderas en «The Mask of Zorro» (La máscara del zorro, 1998), participó con Douglas en «Traffic» (2000) y se hizo con el Oscar de mejor actriz secundaria por «Chicago» (2002).
Antes del cambio de milenio era notorio ya que ambos eran más que amigos. Una fotografía tomada en Mallorca (España) durante las vacaciones de la pareja en junio de 1999 en las que ella aparecía en «top-less» abrazada al protagonista de «Basic Instinct» (Instinto básico, 1992) hablaban por sí solas.
Apenas un año después se concretaba su enlace, el segundo para el actor, que se divorció de su primera mujer, Diandra Luker, madre de su conflictivo hijo Cameron, en 1995, tras casi dos décadas juntos.
Fue de la mano de Luker que Douglas se convirtió en un asiduo de las islas Baleares (España) hasta ser uno de sus embajadores más notables y donde ha continuado yendo con Zeta-Jones.
Este mismo verano volvieron a España y no tuvieron reparos de dejar constancia de ello en Facebook.
Douglas publicó las imágenes que le tomó su esposa en su finca SEstaca, un palacete de finales del siglo XIX con vistas al mar y con un huerto en el que el intérprete posó orgulloso.
La estancia por el Mediterráneo no terminó en las Baleares, ya que la pareja viajó a Israel para celebrar el «bar mitzvá» (iniciación litúrgica del judío en la vida adulta) de su hijo Dylan junto al Muro de las Lamentaciones y disfrutaron en julio de vacaciones en Italia, con visita al Coliseo romano incluida.
No ha trascendido cómo festejará el matrimonio su nuevo cumpleaños, pero nada hace pensar que la tradición de pasar juntos el 25 de septiembre no se cumpla esta vez.
EFE
