Los estrenos del cine son tal cual como se ven por televisión: multitudes de admiradores compiten con fotógrafos y reporteros por la atención de los famosos. Las cámaras disparan sus flashes mientras fornidos guardaespaldas escoltan a las estrellas que atraviesan esta vorágine en sus mejores galas.
La policía y personal de seguridad logran mantener el clamor bajo control. Es una escena embriagante, un evento emocionante y por lo general seguro que pregona el más reciente filme de Hollywood.
Hasta que algo sale mal, como ocurrió en el estreno de «Maléfica» (»Maleficent») esta semana en Los Ángeles: un hombre saltó una barrera y corrió a tocar a Brad Pitt.
¿Pudo haberse evitado esto? Los ejecutivos de Disney se han limitado a decir que fue un incidente «desafortunado e inapropiado», pero expertos en seguridad dicen que es difícil prevenir tales comportamientos en eventos públicos donde la energía de los fans es parte de la atmósfera.
«En un partido de béisbol o de hockey, te revisan de pies a cabeza. Aquí no», dijo Paul Scauzillo, un teniente retirado del Departamento de Policía del Condado de Los Ángeles que ahora trabaja en seguridad privada para eventos de espectáculos. «Los admiradores se alinean detrás de una cuerda y nadie es registrado».
El periodista ucraniano recientemente despedido Vitalii Sediuk fue arrestado tras saltar la barrera de los fans frente al cine El Capitán, donde Brad Pitt firmaba autógrafos, al parecer tomando al actor desprevenido. Sediuk permanecía el jueves en la cárcel con una fianza de 20,000 dólares mientras la policía investigaba el caso. Su abogado, Anthony Willoughby, dijo que el incidente podría considerarse una violación de su libertad condicional, luego que Sediuk fuera arrestado en 2013 tras irrumpir en la ceremonia de los premios Grammy.
La oficina del fiscal de Los Ángeles, dijo el viernes que Sediuk, de 25 años, será acusado por un cargo de agresión, asalto y actividades ilegales en un evento deportivo, de espectáculos o exhibición y por el retraso o interferencia ilegal de un evento deportivo, de espectáculos o de exhibición. Su acusación formal se fijó para el viernes por la noche.
Así como hay contratos de estudios que requieren que los astros asistan a los estrenos, existen planes de seguridad igualmente complicados para proteger a aquellas estrellas en esas citas, dijo Jim Mulvihill, vicepresidente de Security Industry Specialists, una firma internacional especializada en protección para este tipo de ocasiones. Policías uniformados y en ropa de civil, personal de seguridad y los propios guardias de las estrellas suelen estar en estos planes. Pitt tenía guardias con él cuando fue atacado el miércoles por la noche.
Pero mientras que las alfombras rojas de las premiaciones son privadas y la gente es revisada en busca de armas, los estrenos de películas tienen menos restricciones. El estreno de «Maléfica» fue realizado en Hollywood Boulevard, donde los admiradores se reunieron detrás de una barricada para ver llegar a las estrellas.
El lugar donde se realiza el estreno suele contratar seguridad privada para apoyar a los policías, pero no hay detectores de metales o guardias con placas. Cualquier admirador, o posible agresor, se puede sumar a la multitud.
El personal de seguridad está para asegurar que se cumpla con los reglamentos de la ciudad y para mantener controlada a la gente. «No están entrenados ni preparados para hacer otra cosa, ni tampoco están ahí para eso», dijo Mulvihill.
Aunque los policías de Los Ángeles sabían de los antecedentes de Sediuk por sus actos raros con las estrellas, no lo pudieron detener hasta que violó la ley e irrumpió en la alfombra roja. Se dejaron mensajes para la policía de Los Angeles en busca de declaraciones para este reportaje pero no se obtuvo una respuesta.
Sediuk se ha vuelto más agresivo con sus actos a lo largo de los años y hace unas semanas se metió debajo del vestido de América Ferrera en el Festival de Cine de Cannes.
«Es una de esas personas que cae dentro de la zona de la gente que se engaña a sí misma y necesita atención psiquiátrica», dijo Mulvihill, quien ha evitado que Sediuk llegue a otros eventos importantes. «Está relacionado con lo mismo que pasa con las armas de fuego».
La proliferación de tiroteos masivos en Estados Unidos no ha llevado a más seguridad en los eventos en Hollywood, dijo Mulvihill, un exmilitar y agente de seguridad. La mayoría de los asistentes a los estrenos están ahí porque quieren a las celebridades: «99.99% no va a lastimar a nadie».
Pero la atención que se le ha dado a Sediuk podría crear imitadores.
«Veremos más de esto porque la gente siente que le da poder hacerlo», dijo. «Lo vieron y están tan confundidos que quieren sentir la adrenalina que les parece que otras personas están teniendo».
AP
